Discurso del Dr. Enrique Castañeda en la presentación del plan Cayetano 2050

Hoy nos encontramos ante un momento trascendental para nuestra Universidad, pues estamos dando el primer paso hacia un futuro que se construye sobre la base de una visión: Cayetano 2050.

Desde nuestra fundación, el espíritu herediano ha sido el motor que nos ha movido hacia el progreso. El recordado y querido Dr. Alberto Cazorla dijo alguna vez: «¿Quo vadis, Cayetano?», que se puede traducir como «¿A dónde vas, Cayetano?». Y en respuesta decía que no hay ciencia aislada, por ello, es necesario abrir el camino de la educación.

Este pensamiento visionario demuestra que, desde hace décadas, nuestra universidad ya miraba hacia el futuro. Hoy, ese legado de innovación y proyección se consolida con Cayetano 2050, que reafirma nuestro compromiso de liderar en un mundo en constante transformación.

A lo largo de los años, hemos preservado el «espíritu herediano», como un legado de integridad, responsabilidad y pasión por el conocimiento que resalta en cada uno de sus logros.

Este espíritu ha sido esencial para adaptar nuestra visión a los cambios y desafíos de cada época, permitiendo así que la universidad se mantenga vigente y lidere en educación, investigación e impacto social.

Hoy, gracias a esa visión fundacional, seguimos avanzando con la certeza de construir un futuro sólido y sostenible.

Por ello, es necesario decir que nuestro legado no es solo historia, sino es el motor que nos impulsa a ser pioneros y tomar riesgos. Somos la primera universidad en el Perú en aplicar los estudios de futuros y nos proyectamos a un horizonte de casi tres décadas que implica desenvolverse en un contexto de incertidumbre.

A través de este plan, nuestra universidad define sus objetivos y prioridades que empezamos a trabajar desde hoy, con acciones en el corto, mediano y largo plazo.

Asumimos la tarea de formar no solo profesionales excepcionales, sino ciudadanos éticos, innovadores y comprometidos con el país. Asimismo, es nuestro deber generar conocimiento que impacte en las políticas públicas y aborde las necesidades urgentes de nuestra sociedad.

En un contexto donde la educación superior en el Perú enfrenta grandes desafíos como la globalización, la digitalización y la necesidad de una formación más conectada con la realidad y el futuro, buscaremos transformar la educación superior con un modelo donde las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial y el blockchain, sean aliadas naturales de nuestras metodologías de enseñanza y de aprendizaje.

Cayetano 2050 propone crecer de manera responsable. Queremos que nuestra expansión esté basada en la colaboración, la innovación, la excelencia y en un compromiso inquebrantable con la responsabilidad social.

Sabemos que el camino hacia una universidad de clase mundial pasa por alianzas estratégicas, por investigación interdisciplinaria, por el emprendimiento y el autoaprendizaje. Y, sobre todo, por una comunidad universitaria comprometida, unida por un mismo propósito, con la convicción de que juntos podemos lograrlo.

Quiero agradecer profundamente a todos los que son parte de este plan: A nuestros estudiantes, egresados, docentes, investigadores y personal administrativo. Ustedes son los pilares de este camino. Por eso, los invito a ser agentes de cambio.

Con Cayetano 2050, no solo estamos escribiendo un nuevo capítulo en la historia de nuestra universidad, estamos involucrados en la historia de nuestro país.

Cada uno de nosotros es y debe ser parte activa de esta transformación, porque cuando trabajamos para la educación, nos comprometemos con la excelencia para cambiar vidas y transformar nuestra sociedad.

Cayetano 2050: Excelencia que construye futuro.

Dr. Enrique Castañeda Saldaña, rector de la Universidad Peruana Cayetano Heredia